¡Ya hemos regresado de Búbal!
Inolvidable experiencia la que hemos vivido.
La llegada a Barajas para recoger al alumnado del I.E.S. El Médano de Tenerife se presentaba incierta. Compartir autobús y experiencias durante una semana con escolares de un lugar tan distinto, cuanto menos, inquietaba un poco. Sobre las cinco de la tarde llegábamos al pueblo de Búbal con dos horas de antelación, lo que nos permitió reconocer el terreno y tomar un primer contacto con los que a la postre, compartirían experiencias con nosotros.
La llegada de Iker (monitor del programa) significó un no parar: reparto de habitaciones y de grupos de trabajo, cena, reunión para darnos a conocer todas las normas y el trabajo a realizar durante la semana y, lo que más dolió, desconexión digital (nada de móviles excepto de 21 a 22 horas después de la cena). Curiosamente, ese “dolor” fue derivando en el sentir generalizado de que lo mejor de esta experiencia fue la amistad surgida tras esta intensa convivencia. Sin duda, el triunfo de esta actividad.
Entre medias, tajos de trabajo, talleres, juegos tradicionales, labores de mantenimiento, juegos de rol, interpretaciones, bailes de la zona, excursiones por lugares increíbles, representaciones, momentos de ocio … y el pan de Domingo en el horno de leña (sorpresa que no esperábamos y que disfrutamos propios y ajenos).
No podemos olvidar la dedicación y el cariño del personal de Búbal durante esta semana. Nuestro agradecimiento a todo el equipo.
Sin duda una experiencia que recordaremos todos los asistentes.